jueves, 13 de octubre de 2011

Un lugar en otro

Hace poco una amiga me preguntó si tengo cara de amante. Preguntó específicamente si será que los tipos me ven cara de amante y no de algo más serio. Sentí que me devolví al bachillerato donde la pregunta era ¿será que solo quieren un encarrete contigo?. Esa pregunta siempre me ha parecido machista. Nos pone, a las mujeres, en la situación de tener que esperar un hombre que quiera establecerse con nosotras y no en la situación particular en la que me siento que es que no conozco a nadie con quien quisiera establecerme.
Y sucede puntualmente ahora que parece que los tipos a los que atraigo están ya establecidos. Creo que por este lado venía la pregunta de mi amiga... ¿será que los tipos casados ven algo particular en mí que les informa que soy capaz de meterme con ellos a pesar de su condición? Creo que sí. Creo que mi manera de hablar y de comportarme, que no es que sea exagerada, ni vulgar, ni explícita, envía, sin embargo, un mensaje que no logro descifrar del todo, pero que hace ver cierta disposición, digamos flexible, ante la vida. Y creo que el mensaje que envío también es uno de tranquilidad: puedo ser una amante que no te pondrá en problemas.
¿Me molesta? Para nada. Me pregunto si será que no exijo, no demando, no quiero, una posición diferente en la vida de un hombre... pues no, no quiero presionar nada de eso, ni soy una mujer que espere que le den "su lugar", eso me parece tan tonto, tan de mujeres machistas de las que necesitan un tipo para ser felices. ¿Será que un hombre que me vea con esos ojos, no podrá verme como la madre de sus hijos? Es probable, ellos también son muy machistas y tal vez no quieran establecerse con alguien a quien ya le han puesto de antemano una etiqueta como la de "amante profesional" o algo así.
Así que seguiremos esperando un hombre sin estos complejos que quiera querer a una mujer sin estos complejos... traeremos otros complejos, los de la gente que se siente libre de prejuicios.
Tal vez nuestro complejo sea despreciar eso que es tan bonito: tener un lugar en la vida de otro.