Yo no sé que pasó con la última ni con las demás. Jamás he preguntado aunque sé que hay otras. ¿Para qué voy a preguntar?. Él tampoco me pregunta por los demás. Creo que supone que veo a otras personas y aunque le he dicho que no es así, me parece intuir en la mirada que me devuelve que no me cree aunque tampoco me pregunta. No sé para qué le aclaro que no veo a nadie más en este momento. No debería aclarar esas cosas, no lo volveré a hacer. No hay necesidad y puede enviarse un mensaje perverso que termine por arruinar el arreglo que tenemos. Es un arreglo delicado.
Es una relación en la que aunque hay cariño y mucho, no hay acuerdo de exclusividad, ni promesas de fidelidad, ni deseo de poseer más allá del tiempo que nos permitimos juntos, tenemos la libertad de estar o no, de acuerdo solamente con la voluntad.
Y la voluntad ya nos ha arrastrado un buen rato... El amor debería permitir una libertad igual, una autonomía igual, una independencia igual y un compromiso igual. Sobre todo un compromiso igual, ese entendido de estar solamente cuando queramos estar... pero parece que el amor no es tan generoso.
Es una ironía, por supuesto.
El amor, por esencia, no puede ser generoso sino dentro de la esfera doméstica, hacia arriba (los padres, los abuelos) o hacia abajo (los hijos, los nietos), por lo general nunca hacia el costado izquierdo (la pareja). Si además no hay una domesticidad establecida, no hay un hogar, no hay un centro de referencia, el amor no sólo no puede ser generoso sino que hasta puede ser destructivo. El título de un gran libro de Aleixandre lo dice taxativamente: "La destrucción o el amor". No indica una disyuntiva; señala una sinonimia.
ResponderEliminarQue va. El amor sí puede y debe ser generoso. Lo que pasa es que el egoísmo y el capricho son tan cómodos que pocas veces (y pocas personas) nos atrevemos a intentar al menos cambiar esas ideas y esos modos preconcebidos, heredados y dañinos del amor.
ResponderEliminarAnónimo dice que "por lo general" y aclara que podría llegar a ser destructivo... y Ratushka dice que debería serlo y que si no lo es es por egoísta y caprichoso... me parece que estamos todos de acuerdo. ¿No?
ResponderEliminarTengo un espíritu conciliador.
Anónimo dice "el amor, por esencia, no puede ser generoso hacia el costado izquierdo (la pareja)"....Yo digo que puede y debe serlo (generoso). No estamos todos tan de acuerdo.
ResponderEliminarBy the way..¿tú qué opinas?
Ok, sí, no estamos tan de acuerdo, pero creo que la diferencia, entre nosotros, no es fundamental... sigo conciliando.
ResponderEliminarYo creo que el compromiso cultural exigido (no el amor, sino la cultura) no es generosa. Exige exclusividad por encima de los deseos que puedan llegar a la vida de quienes se someten a ese tipo de relaciones. Pero no creo que eso sea amor... yo creo que el amor, no lo que sentimos cuando hacemos ese compromiso, sino el amor de verdad debe ser generoso...
O tal vez es que le pedimos mucho al amor y resulte ser que el amor sea un sentimiento mezquino, así se llame amor y suene tan bonito...
¿Amor = generosidad?
No sé... creo que los seres humanos somos más egoístas que amorosos. Así como creo que somos más pasionales que racionales. Y pedirle generosidad al amor es pedirle que sea racional y que entienda que no es posible ni deseable exigir exclusividad toda una vida... toda una vida única que tenemos. Es pedirle eso, cuando el amor es uno de los sentimientos más pasionales.
Estoy divagando, pero eso creo...