"Por qué no te compras uno, no?"
Tuve que esperar que el tipo interesante con el que tiro de vez en cuando, sin que medien sentimientos, me lo dijera así tan claro, para tomar la decisión de comprar un vibrador. A mi edad - ya estoy grandecita - no había tenido ninguno. ¡Hay tantas cosas que me he demorado tanto en hacer!. Siempre que quería masturbarme tenía a mano mi mano y me había quedado pensando en que eso era todo lo que necesitaba... aunque nunca descarté la idea de tener un "instrumento de placer" como ese, pero como todo lo demás que se ha demorado en llegar, ha sido más por falta de diligencia, porque uno se aplica en las tareas y como ya vimos, hasta las más alocadas llegan.
El caso es que pregunté a una amiga mía. Me recomendó varias páginas, pero la que mas me gustó fue www.lelo.com. Y todo como en mi, el gusto vino por una cuestión estética, desde la página limpia y bien hecha, como la descripción de materiales y funciones en un estilo franco y elegante (a mi modo de ver), nada de cursilerías.
Hice la compra, en la cual obtuve un 10% de descuento porque llené una encuesta virtual que preguntaba sobre la masturbación y para la cual creo no haber aportado ningún dato útil o revelador de la conducta femenina... Tardó aproximadamente 20 días en llegar y después de presentarlo en sociedad (a todo el mundo se lo mostré) todavía me demoré unos días en ponerlo a funcionar.
De Lelo lo mandan debidamente cargado para que no sea sino llegar y usted empezarlo a usar, pero bueno, como digo, yo me demoré tal vez otro mes.
Debo decir:
Supera al original como instrumento de placer, todos los días, a cualquier hora. Así como éste es incapaz de preñar, en todo lo demás cumple su función con un indice de satisfacción, que en mi caso es del 100%. Lo bueno del original es a lo que viene pegado, pero eso tiene que ver es con que Usted sea suficientemente inteligente o afortunada (no sé bien a qué se debe) como para conseguirse uno que venga pegado de un tipo que valga la pena. La tarea es suya; el adminículo en cuestión no da garantía de nada sobre lo que viene adherido.
Éste tiene dos motores, 10 velocidades y 10 funciones. El tipo que me recomendó comprarlo me dijo que el suyo tenía 6 funciones, pero fue incapaz de explicarlas todas y, sobre las que él mencionó, yo sólo conozco dos (on - off), las otras son del tipo fisiológico, que carecen de interés sexual. No hablamos de las velocidades, pero habría que decir por lo menos, que sucede a veces que usted quiere la velocidad número uno (lento) y al señor le da por la número dos (rápido)... el gadget no. El gadget tiene unos botoncitos muy claros, y hace lo que se le ordena. Además es clara la diferencia entre la velocidad uno, la velocidad dos y la velocidad 10, otorgando un proceso bien escalado de sensaciones. También hay que decir que el gadget no gotea ni tiene escapes tan "gravidosos" como los que tiene el original.
En conclusión y habiéndolo comprado, lo único que lamento es no haberlo hecho antes, tengo mucha tarea pendiente, estoy atrasada... me voy! I have a job to do!
Es cierto, lo bueno del original es a lo que viene pegado... pero a diferencia del original no tiene equipaje, ni familia, ni novias pasadas o presentes, ni se tiene que levantar temprano para ir a trabajar, ni esta preocupado por lo que pasa en la oficina.... Y sin duda por mucho que uno l disfrute va a ser una relación impersonal
ResponderEliminarPero no logro distinguir si te quejas o agradeces... a mi modo de ver eso que mencionas podrá ser visto como pro o como contra, dependiendo del estado de ánimo en el que uno se encuentre... por ejemplo, si el desgraciado me acaba de dejar plantada con los crespos hechos, agradeceré que mi gadget no pueda hacerlo, pero si lo que quiero es intimar con alguien entonces miraré a mi vibrador con lástima y sabré que no puedo pedirle que sea más...
ResponderEliminarTal vez toque hacer lo mismo con los tipos: mirarlos con cara lastimera y saber que no podemos exigirles más... :S Mirarlos como miramos el vibrador... con fines utilistas y no más! ; )
Es bueno que diferencies el intimar con alguien del vibrador, no hay nada como encontrar una pareja con quien puedas conectarte, que explore tus puntos mas sensibles, con quien puedas vivir la verdadera esencia del sexo, así la acabes de conocer.. jeje, por lo menos así pienso yo, es bueno hacer sentir bien al otro, ojala no tengas que ver a tipos con cara lastimera y pensar que no puedes exigirles mas, y si llega el caso pues deberías replantear con quien hablas y con quien te acuestas para no tener pensamientos de ese tipo, que estés bien ;)
ResponderEliminarJajajaja... el comentario anterior tal vez sonó duro para los tipos... le hablaba a Casual y Frecuente con quien compartimos un humor ácido sobre el tema... Pero tienes razón, hay mucho tipo lindo con quien se puede lograr una intimidad muy bacana. He sido afortunada, he contado con tipos así y es la clase de hombre que me gusta.
ResponderEliminarGracias por leer el blog!
¿Quien dijo que no se le puede tener cariño a un vibrador? Me da mucha pena pero mi primer y casi único vibrador (lo reemplacé hace solo 3 meses por uno que no me hace tan feliz) Era un personaje modelo 70 al cual llamaba “Oster”, lo usé por más de 20 años y era prácticamente un electrodoméstico más de la casa de mis papas. (ojo, no era una licuadora ni mucho menos) pero no estaba diseñado para tales fines… sin embargo desde que lo descubrí como a los 9, 10 años me hizo muy feliz!
ResponderEliminarPara hacer corta la historia, con él pasé las duras y las maduras… en silencio y sin decir una palabra, me sintió llorar en muchas ocasiones después de venirme pensando en personas que me habían roto el corazón, me sintió la furia de la pasión mas arrecha, me acompañó con personajes inimaginables, inexistentes, inalcanzables… en fin, un día hasta explotó y con mucho cuidado, haciendo alarde de mis conocimientos de electricista, lo reparé con mucho cariño y con gutapercha. Sin embargo un día empecé a ver como se extinguía lentamente la vida de mi adorado Rocinante, compañero de mil batallas.
Debo confesar que ese día derramé una lágrima junto a él, en mi cama de la casa de mis padres, la cual dejaría en unos días… eral el fin para los 2. El debía jubilarse y yo debía emprender mi camino independiente… (Suspiro)
Bueno, pero me he alargado en este comentario. (Aprovecho para dar gracias por el espacio)
Al grano: Soledad, a esta historia le hace falta una pata, no es que quiera destapar su intimidad (usted es la contadora de historias aquí y la experta en el tema) pero tengo una curiosidad… ¿Por que no nos cuenta la parte en que el original no viene pegado a nada y se usa también el vibrador? Partiendo de la base de que en su post anterior usted contó que había estado con una chica… Es decir con un original que no viene pegado a “nada”. ¿Uso el vibrador?, ¿Lo necesitó?, ¿Cómo es eso?
Jajaja, buena pregunta! Sí se uso... recuerdo estar en mi casa, antes de irme para el evento este, pensando será que lo empaco? Y lo empaqué... y se usó... estando allí cómo no sacarlo... pero antes de eso ya muchas cosas se habían hecho y ya había tenido creo que más de un orgasmo... así que se sacó para variar la cosa más que porque lo necesitáramos... siento yo. Pero es que igual, no soy experta en ningún tema, menos en estos, tengo sólo mi experiencia y mis sensaciones para guiarme... punto.
ResponderEliminarMe hiciste recordar otra cosa. En mi casa mis papás tenían una bicicleta estática. Yo disfrutaba la bicicleta estática muchísimo y no entendía por qué. Tenía la misma edad que mencionas tú, 8 o 9 años. Un día le dije a la señora que trabajaba en la casa (a esa edad): esta bicicleta me hace sentir algo muy bueno que no sé que es... así, tan natural. Ella no dijo nunca nada, ni a mi mamá o mi papá ni a mi... y estoy segura que ella sabía yo de qué hablaba. Eso sí, no recuerdo la marca de la bicicleta, qué ingratitud la mía.